La subasta

Dedicamos dos clases a esta actividad:

Lo primero que hicimos fue eso: reflexionar sobre las cualidades que tenemos y sobre las que no tenemos y nos gustaría tener.

Yo puse:

Cualidades que tengo: paciencia, responsabilidad, sensibilidad++++, alegría, nerviosismo, consideración hacia los demás

Cualidades que me gustaría tener: más carácter, valentía, puntualidad

Y... después de esto, ¡EMPEZAMOS CON LA SUBASTA!

Merino nos proporcionó 100 puntos a cada uno con los que comprar las cualidades que él iría ofreciendo.

Fue divertido porque pudimos ver como cada uno daba sus puntos a cambio de la cualidad y como competíamos unos con otros al ofrecer puntos para conseguir lo que queríamos.

Creo que el total de cualidades subastadas alcanzaba las 20 o así.

Yo compré dos cualidades:

1. Valentía, por 27 puntos
2. Firmeza, por 36 puntos

Me sobraron 37 puntos, que intentaba reservar para la puntualidad, pero mi querido compañero Iván pujó muy alto y ya no pude optar a mi cualidad estrella.

Luego, esperaba a que saliese otra que me llamase la atención, pero no me terminaba de convencer ninguna.

Al comentar esto en clase, Merino me hizo pensar, porque nos preguntó si nos habían sobrado puntos por el hecho de esperar y esperar hasta el final y no arriesgar comprando alguna que nos llamase la atención.

Creo que esto es algo que se puede aplicar bien a la vida. ¿Dejamos pasar oportunidades por miedo? ¿Esperamos demasiado por cosas que a veces tardan mucho o no llegan? ¿Debemos arriesgarnos más?

La respuesta a todas esas preguntas es sí, y quizás es difícil, al menos para mí.

Yo pienso que dejaba pasar muchas cosas y luego me arrepentía de haberlo hecho. Ahora esto me pasa menos, voy aprendiendo y sé que cualquier cosa que se nos cruce en el camino es por algo y si no lo aprovechas al final te arrepientes. Es mejor probar y no quedarse con las ganas, porque es horrible pensar: "¿que hubiera pasado si...?"

Creo que el objetivo de esta actividad (podemos llamarlo juego porque fue divertido) es hacernos ver que si compramos cualidades es porque vemos que nos hacen falta en la vida y si sabemos que nos hacen falta pues debemos intentar conseguirlas o cambiar algo que creemos que nos impide avanzar.

Y sobre todo, con esto, hemos aprendido a conocernos un poco mejor.