Digo por desgracia porque este es un tema que a mí me da mucho para hablar, ya bien porque soy muy sensible o porque yo de verdad aprecio la palabra "querer".
Cuando el tema se nos planteó en clase, Merino nos pidió primero que lo hablásemos con la persona que teníamos al lado y luego ponerlo en común uno por uno.
Casi todo el mundo decía que querer a alguien significa apreciarlo, y sin embargo para mí eso no es lo mismo.
Cuando aprecias a alguien es porque es un referente o alguien que ha hecho algo bueno por ti (como un profesional),es el caso de un médico que consigue saber lo que tienes y te salva la vida. Bien, pues en ese caso, a ese médico tú lo vas a apreciar, pero no a querer, o al menos no lo querrás hasta que no pases demasiado tiempo con él y conozcas sus cosas, su rutina... y de un médico eso no lo conoces o no suele ser lo normal.
Y querer a alguien es algo que lleva su tiempo. Para querer, primero debes conocer bien a la persona, compartir tiempo con ella, ver que te llevas bien y que hay "química" y buen rollo.
Yo creo que decir "te quiero" no es fácil porque si lo dices debes sentirlo de verdad. A mí al menos me cuesta decirlo, pero aprecio muchísimo cuando alguien lo dice y se ve que lo dice con el corazón.
Cuando quieres debes demostrarlo con hechos, que es más importante que hacerlo con las palabras.
Cuando quieres te preocupas por esa persona, por que esté bien, y si le pasa algo apenas puedes dormir.
Querer es sentir cariño, pero un cariño especial, más que cariño, es como decir: pues jobá, que fuerte, ¿que haría yo sin esta persona?
También hay diferentes formas de querer. De una manera se quiere a la familia, de otra a los amigos y de otra diferente a las parejas.
Hablaban en clase que querer a la familia a veces es una obligación, como a los primos o tíos que apenas conoces porque viven lejos. Pero yo creo que a esa familia, querer no la quieres, le tienes cariño.
Querer quieres a tu familia cercana, a la que ves todos los días o por lo menos una vez a la semana. Estos son tus padres, herman@s, abuelos...
Quieres a tus amigos, porque te entienden, crecéis juntos, compartís muchas experiencias, etc.
Y a tu pareja la quieres porque es quien te completa y con ella y es algo especial supongo.
En definitiva, no se elige a quien querer y es algo que no entiende de edades ni de idiomas o razas.
Dicen que hay veces que quieres tanto que hasta duele querer. Yo creo que duele en el caso en el que quieres y no eres correspondido.
A veces también sentimos miedo al querer. Muy relacionado con esto puede ir mi canción favorita. Aquí os la dejo:
Y así termino. ¡Espero que os transmitiera tanto como a mí!
Cuando quieres te preocupas por esa persona, por que esté bien, y si le pasa algo apenas puedes dormir.
Querer es sentir cariño, pero un cariño especial, más que cariño, es como decir: pues jobá, que fuerte, ¿que haría yo sin esta persona?
También hay diferentes formas de querer. De una manera se quiere a la familia, de otra a los amigos y de otra diferente a las parejas.
Hablaban en clase que querer a la familia a veces es una obligación, como a los primos o tíos que apenas conoces porque viven lejos. Pero yo creo que a esa familia, querer no la quieres, le tienes cariño.
Querer quieres a tu familia cercana, a la que ves todos los días o por lo menos una vez a la semana. Estos son tus padres, herman@s, abuelos...
Quieres a tus amigos, porque te entienden, crecéis juntos, compartís muchas experiencias, etc.
Y a tu pareja la quieres porque es quien te completa y con ella y es algo especial supongo.
En definitiva, no se elige a quien querer y es algo que no entiende de edades ni de idiomas o razas.
Dicen que hay veces que quieres tanto que hasta duele querer. Yo creo que duele en el caso en el que quieres y no eres correspondido.
A veces también sentimos miedo al querer. Muy relacionado con esto puede ir mi canción favorita. Aquí os la dejo:
Y así termino. ¡Espero que os transmitiera tanto como a mí!
No hay comentarios:
Publicar un comentario